La mejor pedicura en casa para pies fabulosos

Los pies no reciben tanto cariño como se merecen considerando lo duro que trabajan día a día. Una pedicura quincenal es suficiente para mantenerlos en óptimas condiciones, pero el costo de este servicio es la razón por la que tantas personas lamentablemente descuidan sus pies. Sin embargo, con las herramientas adecuadas y un poco de tiempo, es muy fácil hacerse una pedicura digna de un salón en casa. ¡Simplemente sigue estos 5 pasos para lograr unos pies fabulosos y perfectamente cuidados!

Paso 1: Prepara tus pies.

Remojar los pies en un baño poco profundo de agua tibia ayuda a suavizar la piel muerta, lo que facilita la eliminación en el siguiente paso. Aprovechando ¿Por qué no agregas también unas gotas de tu aceite esencial favorito? La lavanda es maravillosa para la relajación, mientras que la naranja es energizante, y la menta o el árbol del té son excelentes para los pies que han estado atrapados en zapatos sudados todo el día. Para los pies adoloridos, agregua una taza de sales para aliviar los músculos adoloridos. Se disolverán inmediatamente y proporcionarán los mismos beneficios que un masaje de pies.

Paso 2: Exfoliar e hidratar.

Después de secarte los pies con una toalla, estarán listos para una buena exfoliación. Puedes usar un exfoliante para pies arenoso, una piedra pómez, una lima para pies o un raspador para pies si tienes mucha piel seca. Sin embargo, ten cuidado de no quitar demasiada piel con esta herramienta, ya que esto podría provocar una infección. Usa un cepillo de uñas para quitar la suciedad o la piel muerta de debajo de las uñas de los pies y para frotar bien las superficies de las uñas. Una vez que tus pies estén suaves, aplica una loción o aceite abundante y masajea la piel para asegurarte de que se absorba correctamente.

Paso 3: Preparar las uñas de los pies.

¡Antes de pintar las uñas de los pies, es importante recortarlas y pulirlas a la perfección! Primero, usa un palito de cutícula para empujar hacia abajo las capas de cutículas sobrantes. Esto te dará más superficie para pintar y también hará que las uñas de los pies se vean limpias y ordenadas. Empujar las cutículas hacia abajo es más seguro que cortar, ya que es muy fácil cortar demasiada piel, lastimándote o dejando tu piel propensa a infecciones. Como es más fácil aplicar el esmalte de uñas en una superficie lisa, usa un pulidor de uñas para pulir los surcos de las uñas. Al cortar las uñas de los pies, debes apuntar a una forma cuadrada sin bordes redondeados. Es común que un borde redondeado continúe creciendo hacia los lados y se convierta en una uña encarnada. Un cortaúñas o unas tijeras te ayudarán a lograr una línea recta de manera rápida y limpia.

Paso 4: Pintar las uñas de los pies.

Ahora es el momento de la parte divertida: ¡Pintarte las uñas! Los corales y neones se ven increíbles en tonos de piel oscuros, mientras que los rojos y azules profundos son favorecedores en tonos de piel claros. No hace falta decir que el brillo se ve bien en todos. Sin embargo, no importa el color, siempre debes usar una capa base transparente para evitar manchar la uña. Para evitar que se astille, especialmente en verano, cuando nuestros dedos de los pies están a menudo expuestos, ¡Aplica una buena capa superior! Los bolígrafos quitaesmaltes son una excelente herramienta para borrar errores, pero otro método consiste en remojar los pies en agua tibia una vez que el esmalte se haya secado; cualquier esmalte sucio se desprenderá de la piel pero permanecerá en la uña.

Paso 5: ¡Relájate!

Ahora que tus pies se ven de un millón de dólares, aplica un poco de aceite para cutículas y masajea, agrega un poco más de crema para pies y relájate. ¡Mira tu película favorita, lee un libro, medita o hazte la manicura para que tus manos luzcan tan fabulosas como tus pies!

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