Rodrigo Herrera: uno de los grandes millonarios de México

El dueño de Genomma Lab descubrió su amor por los negocios desde niño

El pasado viernes se dio a conocer que el millonario mexicano Rodrigo Herrera Aspra, estrella del programa Shark Tank y dueño de la farmacéutica Genomma Lab contrajo matrimonio con la reina de belleza Marta Stępień, quien fuera Miss Canadá en el 2018.

¿Pero quién es Rodrigo Herrera?

El millonario nació en la Ciudad de México, en 1968. De niño le encantaban los videojuegos, pero como en aquel tiempo solamente existían algunos lugares a los que asistía a jugar “mesapong”, iba a gastarse lo que sus padres le daban de “domingo”. Era tan apasionado al juego, que en pocas horas se esfumaba su dinero. De ahí nació su necesidad de generar dinero, y mencionó alguna vez, que fue la era digital lo que detonó su gusto y motivación por los negocios, pues desde muy pequeño, a los 11 años, comenzó con estos.

Su padre fue un hombre que peleó por salir adelante, pues de niño se dedicó a lavar coches en el Barrio Bravo de Tepito, y con mucho esfuerzo logró estudiar para ser un Ingeniero Civil Hidráulico. Un día que volvió de Las Vegas, su padre le dijo que había apostado y perdido mucho dinero, por lo que dijo, no le volvería a pasar, así que decidió invertir en el campo mexicano, pues estaba muy abandonado y requería de mucho ingenio. Comenzó con algunos invernaderos de hidroponía, sembrando jitomates.

Una ocasión, Rodrigo le pidió a su padre que le diera dos cajas de jitomate para venderlas, y tener dinero para los videojuegos, a lo que él le contestó que le daría crédito, pero posteriormente le tendría que pagar. Desde ese momento, comenzó a desarrollar el instinto por vender.

Posteriormente, a los 17, comenzó a trabajar mientras estudiaba. Vio una ferretería en la calle de López, en el centro de la Ciudad de México, que estaba quebrada por ventas bajas. Pensó que el flujo de gente sobre la calle era bastante alta, y pensó que si pudo vender, a los 11 años, jitomates en una calle con una afluencia mucho menor, esto sería más fácil. Ahí comenzó con su primer negocio formal. Sus horarios eran de 7 de la mañana a 2 de la tarde, estar en la escuela, para posteriormente ir a atender la ferretería, en la que se quedaba hasta las 10 de la noche, entre semana. Los sábados iba a atender la ferretería de 10 de la mañana a 8 de la noche.

A los 18 años consiguió poner una segunda ferretería. A los 20 su padre le pidió trabajar en un negocio que tenía, en el que se fabricaban muebles para baños, para iniciar una etapa de expansión. Estudió Administración en la Universidad Anáhuac.

Tras la crisis de 1994, los negocios de su padre vivieron una etapa muy dura. A los 23 años, tras ver un infomercial, se le hizo algo muy novedoso la venta por televisión. Así que tuvo la idea de vender productos cosméticos y medicamentos, pues, pensó, tenían una gran demanda, así que contactó a un grupo de médicos, y nació su primer producto para la piel. Así fue como nació Genomma Lab, la empresa farmacéutica que fundó y que hasta ahora tiene mucho éxito.

Comenzó con lo que hoy es Asepxia, y para el 2000 ya contaba con 10 marcas diferentes. Empezó a vender a través de un call center, para posteriormente hacerlo en puntos de venta.

Para el 2008 su empresa se posicionó, por primera vez en la historia de México, como un laboratorio cien por ciento mexicano como empresa pública con operaciones en 20 países. En 2010 comenzó con la venta de los productos de su farmacéutica en los Estados Unidos, y en ese mismo año fue ganador del Entrepreneur Of The Year de EY México. Actualmente Genomma Lab cuenta con más de 60 marcas en el mercado y opera en 18 países.

Hoy es presidente del Consejo de Administración de Genomma Lab y participa en el programa Shark Tank. Según la revista Forbes su fortuna asciende a más de 600 millones de dólares.

Pago de impuestos atrasados al SAT

En febrero de este año, la empresa Genomma Lab pagó al Servicio de Administración Tributaria (SAT) 750 millones de pesos que tenía pendientes desde 2013, esto tras llegar a un acuerdo.

Así lo dio a conocer la misma empresa por medio de un comunicado, en donde señaló que con el pago se resolvieron las diferencias que se tenían con el órgano gubernamental y refrendando su compromiso por México y la situación por la que atravesaba el país.

“Acuerda un pago voluntario de impuestos por 750 millones de pesos, resolviendo así las diferencias de criterio con la Administración General de Grandes Contribuyentes del Servicio de Administración Tributaria (SAT), y refrendando nuestro compromiso con México y el momento por el que atraviesa el país”, dijo la empresa en el comunicado.

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